jueves, 6 de septiembre de 2012

No hay tiempo que perder



La Derecha ha tomado ansiosamente el poder. ¡No hay tiempo que perder! Después de ver durante dos legislaturas cómo se aprobaba Ley del Aborto, cómo la asignatura de la Educación Para la Ciudadanía debaja bajo mínimos a la de Religión, cómo empezaba a llevarse a cabo una honesta lucha legal por la Memoria Histórica o cómo se permitía el matrimonio entre homosexuales... Después de todo eso, digo, ¡no hay tiempo que perder! Tal que la purga de libertades ha comenzado y, si recientemente era Ana Pastor quien sufría, con el despido de TVE, los efectos de un ejecutivo rancioespañolista,
 ahora le ha tocado el turno al programa radiofónico Carne Cruda. Extraordinario espacio de RNE 3, que el pasado día 31 cesó de instruirnos en música, pintura, poesía y mil materias más de interés cultural...
.....por "motivos económicos" (¿no supone coste alguno la edición de la telenovela Amor Real o el farandulesco programa Corazón, ambos asentados en la parrilla de Televisión Española?).
Lo cierto es que ¡no hay tiempo que perder! por eso la educación sexista, por eso la reforma sanitaria, por eso la restricción del aborto o por eso las retransmisiones taurinas. ¡No, no hay tiempo que perder...! en volver a épocas de Nodo, La Letra con Sangre Entra y Sí Señor, Mande el Señorito.
Lamentable.

A continuación os dejo el enlace del blog del programa: http://blog.rtve.es/carnecruda/, donde tras leer entradas como "Ni Perdón Ni Olvido" sabreis la auténtica razón de la desaparción del espacio. Y esta es la carta de despedida del maestro Javier Gallego, su director y presentador:



"Queridérrimos oyentes,

Lamento muchísimo tener que comunicaros que la nueva dirección de Radio 3 y de RNE me acaba de despedir y ha levantado el programa “Carne Cruda” de su parrilla de emisión. Se cumplen desgraciadamente los temores que muchos me habíais manifestado y que yo había desestimado pues creí en la palabra del recién nombrado director de la emisora, Tomás Fernando Flores, que aseguró hace un mes que el programa continuaría la próxima temporada. A la manera del presidente del Gobierno, el nuevo responsable de Radio 3 responde lamentablemente al dicho “Donde dijo digo, digo Diego” aunque en su caso sería más apropiado decir “Donde dije digo, digo Tomás Fernando”. Así, cuando fue nombrado director se comprometió conmigo a mantenerme en antena y a solo dos días de terminar el curso (y con todas las programaciones de radio cerradas, por cierto), me echa sin darme ni siquiera la oportunidad de despedirme en antena de vosotros, pues los programas de final del verano son grabados. Por eso lo hago desde aquí. Me pueden quitar el micrófono pero no la palabra. Y mucho menos, quienes no cumplen la suya.

La nueva dirección de la emisora, formada por Tomás Fernando y su segundo, Benito Pinilla, ha alegado motivos económicos para justificar mi cese y la retirada del programa. Por esa misma razón, hace un mes acepté una rebaja del 20% de mi sueldo y de la retribución del resto de colaboradores del programa, condición que hemos tenido que asumir todos los trabajadores externos de la casa para continuar en antena. Se supone que así cuadrábamos el exiguo presupuesto de la emisora. Pero ahora el equipo directivo dice haber encontrado inesperadamente un nuevo agujero presupuestario mayor del que creía y culpa a la anterior dirección de no haberle dejado las cuentas a su disposición. Solo le faltó a Tomás Fernando decirme que la culpa es de la “herencia recibida”, por utilizar la terminología oficial del partido. La culpa es de la herencia y el culpable es Carne Cruda, por lo visto, pues es el único programa diario que va a ser suprimido de la parrilla, a pesar de haber doblado la “audiencia recibida” y de ser el espacio más seguido en Facebook de todo Radio Nacional. Pero no nos echaremos flores nosotros. Para echarnos ya esta Flores. Sí, nos ha echado Flores. Pero llenas de espinas.

Dice que nos echa porque el programa sale muy caro. No tengo ningún problema en publicar mi sueldo de autónomo, sin pagas extras ni derecho a vacaciones. Cobro alrededor de 1.400 euros mensuales limpios después de pagar Seguridad Social, IRPF, el impuesto de sociedades y el resto de gastos de la empresa que tuve que constituir por exigencia de Radio Nacional, que trata así de evitar una relación directa con la persona física. Muchos de los colaboradores contribuyen desinteresadamente al programa y tres cobran una cantidad simbólica de 50 euros por colaboración después de haber trabajado gratis las dos primeras temporadas. El resto del equipo son contratados de RNE cuyos contratos siguen vigentes. Además, tras la noticia del despido, yo he ofrecido a Tomás Fernando Flores la posibilidad de negociar, lo que a él no parece habérsele ocurrido como solución. Me ha prometido consultarlo y llamarme. No lo ha hecho. No he vuelto a tener noticias suyas. Ni las puedo esperar de quien ya ha demostrado que no cumple lo que promete.

Por todas estas razones y por la forma poco verosímil en que me justificó su decisión, no pude creer a Tomás Fernando cuando se apresuró a decirme al cesarme que no era por motivos políticos, aunque yo ni siquiera los había sugerido. ‘Excusatio non petita, acusatio manifesta’ que decían los latinos, es decir, dime de qué te excusas y te diré de qué te acuso. Yo acuso a la nueva dirección de Radio 3 de haberme engañado dos veces: cuando me dijo que seguiría y cuando me dice que no hay motivos ideológicos para que no continúe. Fui un ingenuo al creerle la primera vez. No seré tan idiota de creerle una segunda.

Su discurso y maneras se parecen tanto a las del actual Gobierno que cualquiera diría que el Gobierno está detrás. No voy a ser tan mal pensado. No está detrás. Está delante porque ni siquiera se molesta en ocultarlo. No han ocultado que les estorbaban periodistas que pueden ponerles en tela de juicio, como Ana Pastor, Toni Garrido o Juan Ramón Lucas, a los que han despedido cuando mas éxito tenían sus respectivos programas. Para ellos, mi respeto y admiración porque han caído por una causa digna y que los periodistas debemos dignificar: hacer periodismo. Lo dije cuando el Gobierno decidió tomar el control de la radio televisión pública gracias a su mayoria absoluta: veenceréis pero no convenceréis, como afirmó Unamuno. Hoy pienso que me equivoqué: ni vencen ni convencen. Convence el que tiene razones y ellos han demostrado que solo saben responder a los argumentos del contrario con la fuerza. Y no vencen porque cada decisión que toman les hace perder el escaso crédito que tienen entre gran parte de la ciudadanía, incluidos algunos de sus votantes.

Yo sí que siento que he ganado muchísimo en estos tres años fabulosos de radio. He ganado a la audiencia más viva, inquieta, exigente, combativa y bulliciosa que un programa puede desear, incluidos algunos críticos feroces que siempre conviene tener para la sana confrontación de opiniones. He ganado la posibilidad de hacer radio en libertad y el privilegio de compartirlo con un equipo esforzado y talentoso que se ha dejado la piel en las ondas. Ha sido un placer inconmensurable y un privilegio compartir con ellos y con vosotros tantas experiencias radiofónicas y periodísticas estimulantes y emotivas, tantas horas de discusión, ideas, lucha, indignación y pensamiento crítico. Ha sido una satisfacción aprender de los muchos errores y tener la oportunidad de enmendarlos y tratar de mejorarnos a cada paso. Os doy mi palabra de que lo hemos hecho lo mejor que hemos sabido. A los que dirán que tengo lo que me merezco, solo puedo darles la razón. De hecho, este programa y su audiencia es mucho mas de lo que esperaba como recompensa. Por eso sigo contento en este momento triste. Puede que me hayan quitado el programa y el trabajo pero ya no me pueden quitar lo radiado.

Sé que solo soy uno de tantos que pierde su empleo en estos días amargos. Sé que solo soy uno de tantos periodistas que pierde su trabajo en este país precario. Y sé que Radio 3 seguirá siendo una grandísima emisora sin el programa pues cuenta con una plantilla con mucho talento que hace un enorme trabajo con muy pocos medios. Lo que quiero decir es que yo soy uno más. Pero aparte de mi pena personal y de la que sentiréis muchos por la pérdida de Carne Cruda, creo que hay algo más importante que todos tenemos que defender. Parafraseando mi adorada película “Amanece que no es poco”, todos somos contingentes pero la radiotelevisión pública es necesaria. Es necesario un medio de comunicación público, independiente y crítico que sirva a los ciudadanos para controlar a este Poder. Y es más necesario que nunca cuando el Poder trata de gobernar a golpe de decreto y tijeretazo, sin control por parte del ciudadano y tratando de controlar hasta los pensamientos que éste tiene. Hay compañeros en Radio Nacional que tratan de salvaguardar su dignidad profesional y un periodismo decente en estos tiempos oscuros de purgas, censuras y consignas informativas que ya se están imponiendo en Radio Nacional. Les deseo suerte, fuerza y, sobre todo, valor. Valor es lo que más necesitamos en estos tiempos.

Yo creo haber luchado por la radio pública desde dentro. Ahora me toca hacerlo desde fuera. Cuento con vosotros. Que la radio nos acompañe."



El Sietemesino
Imagen (Google)

7 comentarios:

  1. ¡Que asco! tanto lacayo, tanto miserable, tanto inquisidor, tanto ciego.......

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  2. Seamos coherentes, un programa llamado "carne cruda" no puede mantenerse en la parrilla. XD

    Quizás el año que viene ya empiecen a permitirse quemar libros en las plazas y si ganan otra legislatura, que si ganamos en Eurovisión, todo puede ser, comiencen a encarcelar a los individuos más peligrosos (para el régimen).

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  3. Ya se sabía que los medios de comunicación se iban a convertir en medios de propaganda y adoctrinamiento del partido, que cuestiones tocantes a la Iglesia, serían devueltas a sus principios (educación religiosa, eliminación de la asignatura de Educación para la Ciudadanía, Ley del Aborto, el matrimonio homosexual,...)El Estado, con el PP, se salta la Constitución que tanto dice defender, y deja de ser laico para devolver los favores prestados a la Iglesia y seguir manteniendo sus privilegios semifeudales. No debemos de olvidar que el PP, es la continuación (gracias a nuestra "modélica" Transición) del franquismo duro y puro, y mientras no se haga una reforma que en su momento no se hizo, aquí tendremos franquismo mandando para el resto de la vida.
    Saludos.

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  4. El comentario de Piedra es lapidario, me sumo.

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  5. Tensa la situación de España, no puedo comentar del todo, pero sigo al tanto, digo, en todos los tendederos del mundo se seca la misma ropa, y hoy mejor que nunca puedo decir que México no canta mal las rancheras.

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  6. Un político debiera ser (y ser consciente de que lo es) un empleado temporal al servicio de un interés general, más allá de discrepancias lógicas en la concepción de como conseguir llevarlo a cabo. Esto es de señoritos de cortijo, simplemente. Que pena :S

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