Cómo me hechizan tus manos, tus manos...
Lejanos racimos con sus diez soles
que más calientan cuando asomar
los veo en el horizonte de tus labios.
Lejanos racimos con sus diez soles
que más calientan cuando asomar
los veo en el horizonte de tus labios.
Tus manos, tus pequeñas y delicadas manos...
Planicies por misteriosos ríos dibujadas
bajo en cuyas aguas duermen
infinitas caricias reservadas para mí.
Planicies por misteriosos ríos dibujadas
bajo en cuyas aguas duermen
infinitas caricias reservadas para mí.
Sepulta mi cuerpo con tus redondeadas manos
poséelas con el afilado norte que las corona
y sabrás cómo me embrujan tus manos...
tus manos de espuma, amante y esperanza.
poséelas con el afilado norte que las corona
y sabrás cómo me embrujan tus manos...
tus manos de espuma, amante y esperanza.
El Sietemesino
muy bonito poema.
ResponderEliminar