miércoles, 9 de noviembre de 2011

Un día cualquiera

Hoy (como la mayoría de los días), me he levantado y he ido a la compra. Hasta aquí todo es de lo más rutinario, pero según voy yendo por las calles por las que he ido toda la vida desde que era una cría casi no reconozco nada. Todos aquellos pequeños comercios de barrio ( droguerías, ultramarinos, fruterías, etc... ), ya no existen o bien son locales cerrados o en su lugar son locutorios, fruterías regentadas por árabes, chinos, etc. Por lo que, una va andando como si este ya no fuera su barrio de toda la vida y que la nueva eres tú, porque ya no sabes donde comprar ésto o aquéllo y terminas farfullando mientras vuelves a casa: "Hay que joderse".

La Minina
Imagen (Google)

6 comentarios:

  1. Esa es una nefasta consecuencia del neoliberalismo. EL pequeño comercio de toda la vida no tiene lugar en este sistema y su puesto es ocupado por los comercios de los "pakis", que toso sabemos que el dinero procede del blanqueo de la venta de droga y que utilizan mano de obra esclava, o de "chinos", de la llamada economía inútil, porque los productos son chinos, los trabajadores chinos, trabajan con bancos chinos, y se llevan los beneficios a China. Aparte de eso, lo que venden es de una calidad ínfima.
    Saludos y un abrazo.

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  2. Si nadie comprara en los comercios chinos no proliferarían. Pero con la crisis que hay y los precios que tienen tampoco culpo a la gente que lo hace.

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  3. Hay negocios de chinos que ocupan un local inmenso y apenas tiene negocio, pagando un alquiler alto al mes. ¿ Cómo es posible ?

    Saludos

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  4. Vivo en un pueblo pequeño y aun así el paisaje urbano ha cambiado sin casi darnos cuenta ; el futuro ya está aquí.
    Saludos

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  5. Joder, me has leído el pensamiento. De hecho pensaba escribir una reflexión, que no descarto, sobre un malestar que hace tiempo que siento y que puede parecer políticamente incorrecto manifestar; para nada es racismo ni parecido, pero es muy incómodo sentirte un extraño en tu casa, y la ironía de que estemos buscando oportunidades de trabajo en otros países porque aquí no se presentan.

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  6. En mi ciudad hay una calle en la que todas las tiendas son regentadas por marroquies; hasta aquí no sería un problema... pero cuando pasas por esa calle, te miran mal y entre insultos te dicen que esa zona es suya.
    Lo que más me jode de todo esto es que luego, los racistas, somos nosotros...y aquí sí...¡Hay que joderse!

    Ta ta. Z

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