Nevermind son dieciséis primaveras
e impaciencia por comerme la vida;
son planes, chicas, fumar a escondidas
y un beso de Sonia por vez primera.
Nevermind es aquel curro en las calderas
y juergas mortalmente divertidas;
las birras en el pub de la avenida,
quinientas pesetas en la cartera.
Esa palabra no revela sino acción
atrevimiento, aire fresco, ilusión...
ganas, sobre todo, de tener ganas
de demostrarle cosas a la gente.
Nueve letras que saben a un tiempo mejor,
a verdosa, seductora, prohibida flor;
Nevermind huele a olvido del mañana,
a gozoso espíritu adolescente.
El Sietemesino
Imagen (Google)
Me gusta más el poema que el disco.
ResponderEliminarNevermind es eso que nunca debe de faltar en el ipod de todo aquel que tenga buen gusto musical.
ResponderEliminarTa ta.
Nevermind me recuerda a un tiempo de amigos, risas y ausencia de preocupaciones.
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