Lo más parecido que vi a la felicidad fue la amplia y silenciosa sonrisa de Sonia; su mirada brillante y plena, como de íntimo agradecimiento. Nunca supe qué hacer ni qué decir cuando me miraba así, cuando me sonreía de esa forma; un perrito tan domesticado como yo no sabía cómo reaccionar: demasiada transparencia, demasiada naturalidad, demasiado salvajismo.
Todavía hoy, muchos meses después, se abren las llagas cada vez que pienso en esa mirada y esa sonrisa que me han dado una pista de lo que es estar realmente enamorado.
El Sietemesino
Foto (Google)
Que dificil es en esta época encontrar un poco de tiempo para pensar. Si encuentras esos minutos te sirven para valorar convenientemente lo que realmente importa.
ResponderEliminarQué palabras más bonitas, te dejo una frase muy chula aunque no tenga mucho que ver:
ResponderEliminar"Enamorarse es perder la razón... al fin" de Caballo de Troya
Precioso. Me ha encantado esa difícil sencillez con que expresas el amor.
ResponderEliminarEs una prosa poética llena de ternura hacia la persona amada. Lindo, lindo, amigo. Felicidades y Feliz Año.
ResponderEliminarHola
ResponderEliminarMuy bonito, y más en estas fechas.
feliz Año 2011
Palabras delicadas y sencillas que me han llenado de ternura al leerlas..me dejas impresionada cada vez que leo reflexiones como estas!
ResponderEliminarUn abrazo.
... primero tomese la pastilla, después hablaremos y no se preocupe enseguida vendrán a verle...
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